Título: El resto es silencio
Autor: Carla Guelfenbein
Saga: Autoconclusivo
Editorial: Planeta
Páginas: 307
Precio: $10.000 (Chile)
Tres personajes engarzados en una historia de vida, amor y redención; Juan, un cirujano frío y exitoso a quien la muerte de uno de sus pacientes arroja a un laberinto de recuerdos, resquebrajando todo aquello que creía inmutable; Alma, su segunda mujer, quien cansada de vivir junto a un hombre que teme los sentimientos se deja encantar por la pasión en una aventura excitante que le hará, sin embargo, cuestionar los cimientos de su vida; Tommy, el hijo de Juan, quien a sus doce años padece una enfermedad al corazón y que, afligido por la lejanía de su padre, intenta encontrar las razones que llevaron a su madre al suicidio. Una familia inserta en el mundo contemporáneo, marcada por la incomunicación. Cada uno de ellos tendrá que romper el cerco de su soledad, ¿pero cómo?
Mi Opinión
¡He regresado! Finalmente he dejado a un lado mi ausencia por estos lares porque afortunadamente he podido ir acabando con la mayoría de mis exámenes, por lo que he decidido volver con la reseña de un libro que me sorprendió gratamente; tanto por la calidad de la escritura como por la historia que se nos presenta. Es un libro que recomiendo totalmente y que ha pasado definitivamente a convertirse en uno de mis favoritos de este año. Es por ello que les dejo la reseña sin más.
Yo sé que el silencio, cuando no lo conoces, da miedo.
Como siempre hago comenzaré informándoles un poco acerca del argumento que tiene la historia, pese a que en la sinopsis se nos den muchísimas pistas de lo que estamos por encontrar dentro del libro. Juan vive con Alma, su segunda mujer. De su primer matrimonio tenemos a Tommy, un niño con una deficiencia cardiaca que se la pasa entre su amigo imaginario, los correos de odio que recibe por parte de sus compañeros de colegio y visitando el blog de Mr. Thomas. Lleva una vida solitaria sin tener un mayor conocimiento acerca de sus raíces. Es así que una conversación que escucha a escondidas lo lleva a querer indagar más sobre la muerte de su madre, encontrándose con más de una sorpresa a medida que avanza en su investigación. Paralelamente, descubrimos el mundo de Juan, un cirujano que vive de los recuerdos de su ex mujer, refugiándose del dolor en sus pacientes por lo que resulta ser un hombre que siempre deja en primer lugar su trabajo. Alma, a su vez, busca terminar con su soledad en los brazos de un antiguo amor, olvidándose poco a poco de su familia. De esta forma, y a través de cada uno de los personajes, es como nos vamos enterando de lo que a cada uno se le presenta en el camino.
No sabía qué esperarme del libro cuando por mera casualidad lo tomé en mis manos al estar en la librería, ya que la portada había llamado mi atención la cual incrementó cuando leí la sinopsis. Sin más lo compré. Ahora me alegro de haberlo hecho, ya que entre las páginas del libro se esconde una historia llena de incertidumbre, de angustia, de dolor y de verdades que provocan que el libro resulte ser espléndido. Carla nos invita a adentrarnos en la historia de una familia bastante real, con problemas reales y con situaciones reales, donde cada integrante nos cuenta los sinsabores de la vida y nos enseña con sus actuares lo que esconde el silencio que cada uno ha forjado. Tommy, Juan y Alma, a pesar de estar en la misma familia, experimentan y perciben cosas diferentes. Ninguno es igual al otro, cada uno cuenta con sus propias formas de ver la vida y de llevar a cabo lo que se les va presentando.
Lo que reina en esta historia es la incomunicación, un tema muy presente en nuestros días, lo que lleva a los personajes a llegar a sus propias conclusiones respecto del actuar de los otros y llevándolos a enfrentarse constantemente en el transcurso de los acontecimientos. Además de ello, se nos presentan temas que son el reflejo de la sociedad actual, donde a través de nuestro trío protagonista podemos llegar a identificarnos en más de alguna reflexión sobre la indiferencia, el bullying, la discriminación, el miedo, la necesidad de amor, entre otras cosas. Todo esto se encuentra entre las páginas del libro, donde Carla Guelfenbein sabe manejar a la perfección el tema de insinuar en lugar de explicar lo que sienten y viven sus personajes, lo cual dentro de su fluida narración se agradece bastante. Pese a que la historia que se nos presenta posee algunos tintes de nostalgia o de temas que pueden resultar algo "impactantes" la forma en que se encuentra escrita permite que no resulte ser un libro difícil de comprender. Aunque me costó un poco tomarle el ritmo al comienzo, no se hace pesado en ningún momento.
En la guerra es mejor morir. El sufrimiento hace que los guerreros se vuelvan cobardes.
Los personajes resultan ser el punto más fuerte que tiene el libro, ya que se ha logrado distinguir a medida que la historia avanzaba quién era el que nos estaba narrando los sucesos; tienen personalidades muy bien perfiladas que la autora nos ha sabido enseñar de una forma adecuada. Tommy, un niño-adulto de 12 años que se siente solo a pesar de vivir con su padre biológico y una madrastra que lo adora como si fuese su hijo verdadero; Juan, un cardiólogo demasiado sumergido en su trabajo y atormentado por el problema de salud de su hijo y el suicidio de su primera esposa; Alma, la segunda esposa, que se ve enfrentada al conflicto de un alma dividida entre el amor de su familia y su amante, un ex amor de juventud. Pese a que los tres personajes me hayan gustado, Tommy es quien se lleva todo el protagonismo, porque a pesar de que sea tan sólo un niño posee pensamientos que pueden llegar a sobrepasar a los de un adulto. Además, se hace imposible no tomarle un gran cariño, lo cual me llevó a muchas veces sufrir al verme imposibilitada de entrar al libro y darle un fuerte abrazo.
En relación al final, puedo decir que dio un giro que no me esperaba y que tiene que ver con uno de los personajes, lo cual fue la razón del por qué quedé tan devastada y con el corazón en miles y miles de pedazos. Aún así, me parece que fue la mejor decisión que pudo tomar la autora, ya que es un fiel reflejo de que no siempre en la vida tienes un perfecto desenlace. Ahora, también debo destacar que la historia nos deja un fuerte y gran mensaje, el cual no les diré porque quiero que ustedes mismos lo descubran. Y es gracias a ese mensaje que recomiendo este libro a todas las personas, porque nos puede enseñar a jóvenes y a adultos un poco más acerca de la vida de una forma tan delicada como solo Carla Guelfenbein puede explicar.
Las palabras son a veces como flechas. Van y vienen, hiriendo y matando, al igual que en las guerras.
En conclusión, El resto es silencio es un libro que no dejará indiferente a nadie; con una narración exquisita y muy apegada a la realidad logrará calar hondo en el corazón de quien lo lea. Una historia interesante, llena de sensibilidad y con unos personajes que quedarán presentes en el lector aún cuando la lectura ya haya acabado. Libro que personas de todas las edades pueden llegar a disfrutar y apreciar, por lo que es 100% recomendable.
PUNTUACIÓN: 5.0